Como sabéis, los autónomos y profesionales por cuenta
propia, por definición, deben asumir un porcentaje de riesgo mayor que un
trabajador por cuenta ajena. Eso es parte del ADN de un emprendedor.
El buen emprendedor debe asumir más riesgos que el
resto a cambio de poder lograr un éxito mayor. Sin embargo, una cosa es asumir
riesgo y otra muy distinta es ser un temerario, por ello es conveniente
contratar un seguro de baja laboral como
cobertura ante posibles imprevistos en materia de salud o baja laboral.
Como decimos, como autónomo hay una parte de riesgo
que se asume por el mero hecho de realizar la actividad por cuenta propia.
En caso de
una incapacidad que impida desarrollar la actividad laboral con normalidad, el
autónomo tiene derecho a solicitar una prestación. Dependiendo del grado de la
misma puede llegar a convertirse en permanente. La incapacidad laboral comienza
en el instante en el que el trabajador no puede desarrollar las funciones que
tiene que realizar en su puesto. Existen dos tipos de incapacidad:
- Incapacidad Temporal (IT): la incapacidad será
temporal el trabajador está impedido solo durante cierto tiempo, pudiendo
regresar con normalidad a su puesto de trabajo transcurrido el periodo de
recuperación.
- Incapacidad
Permanente (IP): tras finalizar el tratamiento y habiendo recibido el alta
médica, el trabajador mantiene reducciones funcionales o anatómicas
graves que reducen, dificultan o imposibilitan su capacidad laboral.
Seguros de baja laboral
En general, los autónomos cotizan
menos que los asalariados, por lo que ante una incapacidad temporal, la
prestación pública será menor en casos de baja de maternidad o paternidad,
enfermedad o accidente. Por ello, contratar un seguro de baja laboral puede ofrecer ingresos extra hasta que se produzca el alta.
Seguros de protección
Asimismo, para los autónomos, parar la actividad
laboral significa también que se paralizan también los ingresos. Por eso, existen
también otros seguros de protección pensados
especialmente para proteger los ingresos en caso de que el autónomo se
encuentra en una situación en la que no sea posible trabajar o el caso de otros
seguros como de vida o seguros de accidentes.
Seguro de decesos
Además, existen en el mercado distintos seguros
de decesos, para que en el desafortunado caso de que la muerte
del asegurado, los gastos del sepelio estén totalmente cubiertos.
Es importante conocer que, en muchos casos, estos
seguros se pueden desgravar en la declaración de la Renta por lo que, aunque
suponga un gasto, posteriormente se puede recuperar parte del coste. Esta
desgravación depende de cada tipo de seguro y del importe abonado.
Si tienes alguna
pregunta, no dudes en consultarnos.
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